martes, 24 de mayo de 2011

Volar...




¿Te ha pasado alguna vez?
Conoces a alguien
y tratas de no ver lo que es;
lo que te gusta... lo sabes bien.

Notas su mirada extraña
pero te niegas a aceptarla;
tratas de convencerte a ti mismo
de que es algo normal en el... que con todos hace lo mismo.

Sin embargo un día no puedes mas,
por fin tiene ese detalle que te hace suspirar;
que hace brotar un par de extremidades extras
y lo tratas de alcanzar... no solo a el.

Y luego caes,
tal cual Icaro en pleno vuelo;
de algún modo nada fue real,
o al menos tratan de hacerte creer eso.

Es triste el numero de veces que he caído en ello,
pero al menos he aprendido
que al igual que el toro rojo en la lata,
que te den alas, no significa que te enseñen a usarlas...

hay que buscar las lecciones de vuelo aparte.







(Segunda imagen por Erin Morgernstern)

lunes, 16 de mayo de 2011

"Mundo feliz, planeta feliz..."







"Mundo feliz, planeta feliz... " decían con voces apagadas los miembros de la multitud. Caminando lentamente, arrastrando los pies, dando tumbos con los brazos tiesos en el aire, la mirada perdida y una bizarra y marcada sonrisa en la cara. Cual zombies afectados por oxido nitroso.

No hacían daño alguno, al menos no intencionalmente. No buscaban carne humana ni nada por el estilo, solo caminaban sin rumbo, sin siquiera orientación en el espacio. Algunos incluso parecían querer caminar a través de las paredes en momentos, como si el espacio real no existiera para ellos; como si en su mente habitaran en un espacio diferente, un espacio, aparentemente, muy feliz.

Aun a pesar de su errático avance se movían juntos, y a pesar de que cada vez eran mas los que morían en diversas situaciones provocadas al no estar consientes de su entorno, el grupo cada vez era mas grande... mucho mas grande.

Lo creyeron un virus, toda un conspiración de alguno de los gobiernos, la realidad, era que su monótono cantar resultaba a muchos una promesa; una promesa de deshacerse de sus problemas; de dejar su sufrimiento atrás; preferían ser dichosos en un mundo de fantasía que sufrir en la realidad; preferían vagar sin rumbo perdidos en si mismos que buscar algo que pudiera hacerlos sentir mejor. Así, en un acto de egoísmo se perdieron en sus mismos sueños, fueron eliminados por su propia y falsa felicidad, pues aun cuando seguían con vida ya no vivían mas... solo era mera existencia.