domingo, 31 de marzo de 2013

Tan solo así.







Deja de querer acercarte tanto a mí. No lo entiendes ¿verdad?

Existen dos tipos de materiales. Los primeros son suaves, cual cálidas y maleables masillas que pueden interactuar fácilmente entre sí. Se adaptan uno al otro, a veces hasta fundirse en uno, formando algo completamente nuevo… aunque no siempre bueno.

Los segundos son rígidos, como áspera y fría piedra. Puedes tomarlos, pero jamás te tomaran a ti. Puedes aferrarte a ellos, incluso calentarlos un poco en el proceso, pero la fricción seguirá ahí.

Los opuestos se atraen, pero no siempre es mejor así.

Tratar de unir carne a la carne y de algún modo lo harás; trata de unirle a la roca y la lastimaras.

Golpea dos rocas fuertemente, ve como resisten. Golpéalas de nuevo, forzarlas a gritar, estrújalas hasta que saquen chispas, lo harán, encenderán una llama que solo ellas resistirán… y solo eso será suficiente… solo para ellas es suficiente.